Una distensión de los isquiotibiales o un tendón de la corva es un sufrimiento en uno o más, de los músculos de los isquiosurales (bíceps femoral, semimembranoso y semitendinoso). A menudo resulta de una sobrecarga de los músculos o tratar de mover los músculos demasiado rápido. Si ha sufrido un impacto en la parte posterior de la pierna, debe tratarse como una contusión. El estiramiento incorrecto y el uso excesivo pueden resultar en una distensión de los isquiotibiales. Las lesiones crónicas surgen por no rehabilitar adecuadamente las lesiones agudas de los isquiotibiales, pero también pueden ocurrir por pequeñas cantidades de traumas repetidos durante un período de tiempo. La poca flexibilidad de los isquiotibiales aumenta la probabilidad de pequeños desgarros, lo que hace que el músculo se acorte y se contraiga.